
Vecinos de San Juan La Laguna, Sololá, andan alborotados porque casi un centenar de judíos ultraortodoxos que se ha asentado en aquella población. Para quienes no lo saben, San Juan es una población mayoritariamente maya de las étnias quiché y tzutujil, ubicada en el suroccidente del lago de Atitlán.
¿Qué les incomoda a los habitantes de San Juan?
El párroco católico de San Juan se mostró prudente y sólo comentó que sí ha visto a los llamados judíos ortodoxos, pero ignora si hay algún malestar. ¿Se habrá enterado por la entrevista que le hicieron? Sin embargo, el pastor de otra iglesia cristiana fue más audaz y dijo que aunque no les ha hablado, vienen a confundir a la población, porque están desviando el verdadero concepto de Dios. Un poblador de San Juan dijo que la comunidad sanjuanera teme perder su identidad.
A los quichés y tzutujiles de San Juan les incomoda que los nuevos vecinos se vistan de negro, tengan muchos hijos y que sean hoscos. La gente desconfía de ellos y los acusan de que no hablan con nadie. Les causa extranñeza que se bañen desnudos en el lago -de acuerdo con una tradición ancestral suya- y no les agrada que regateen por los precios en las tiendas. Todo aquello ha ocasionado que los nuevos vecinos sean víctimas de insultos y de discriminaciones racial y religiosa. A los nuevos vecinos, los habitantes de San Juan también los acusan de no ser higiénicos.
El hecho es que son distintos.
Los nuevos vecinos de aquella población que es mayoritariamente quiché y tzutujil son perseguidos en otros países porque no envían a sus hijos a las escuelas -y puede que me equivoque-; pero viniendo de Canadá la acusación, sospecho que el cuco es que no envían a sus hijos a las escuelas del estado, ni cumplen con las exigencias estatistas al respecto.
Se les acusa, también, de usar la vara para corregir a los niños; pero…ese uso de la vara, ¿no es, también, una práctica aceptada en ciertas iglesias cristianas? En la Biblia, en Proverbios 23, 13 14 se lee: No ahorres la corrección al joven, no morirá porque le castigues con la vara. Golpéale con la vara, y librarás su vida del abismo. No soy un entusiasta de los castigos físicos; pero…estos detalles llaman a la meditación, ¿o no?
¿Por qué me llamó la atención este tema? Porque siempre me inquieta lo rápidas que son las personas para desconfiar, criticar y perseguir a los que son diferentes en todos los tiempos y en todas las culturas. Y porque ayer ver una peli que creo que también invita a meditar. Estamos acostumbrados a pensar que la persecución contra los judíos, en la Europa de la II Guerra Mundial, fue cosa de los Nazis, y de los alemanes; pero ahí está que no. Los franceses, por ejemplo, también hicieron su parte en el holocausto. Sospecho que cualquier pueblo puede hacer cosas horribles a causa de los prejuicios, la ignorancia y el fanatismo.
La peli es La llave de Sara y puedes verla aquí.